NACE UNA NUEVA CALLE EN BERLÍN
Casas para un informático y una pareja mayor en una calle-patio berlinesa
En Berlín, este tipo de patio de manzana está muy extendido y la mayoría de ellos poseen un atractivo misterioso que atrae tanto a turistas como a los propios habitantes de la ciudad. Son espacios con una clara vocación urbana, a los que la ciudad desea invadir con la desbocada intensidad de la urbe alemana. Tradicionalmente, cuando en uno de estos callejones, o proyectos de calle, ha surgido la necesidad de construir, la estrategia de lo edificado siempre ha sido buscar la luz y buscar la ciudad, dando fachada a la calle y/o elevando su cota. De este modo, el callejón, oscuro ya de por sí, se consolidaba como un espacio casi residual, trasero, al que había que controlar con puertas, horarios y rejas. Ahora bien, ¿cómo evitar esto a la hora de intervenir en este tipo de lugares?
Una posible solución es la de mantenerse a cota de calle, traer la luz en lugar de ir a buscarla, acompañar a la ciudad en su insaciable apropiación de espacios.