Dynamisch-Konstruktives Kraftsystem
László Moholy-Nagy y Alfréd Kemény, 1922
"La construcción es la encarnación de la vida y el principio de todo desarrollo humano y cósmico. Llevándolo al arte de hoy, esto implica la activación del espacio mediante sistemas de energía dinámico-constructivos (...). Debemos, por tanto, reemplazar el principio estático del arte clásico con el principio dinámico de la vida universal. En la práctica: en vez de una construcción material estática, tenemos que organizar una construcción dinámica, en la que el material funciona simplemente como un transmisor de energía. Llevado más lejos, la construcción única dinámica lleva al SISTEMA DE ENERGÍA-DINÁMICO-CONSTRUCTIVO, con el que, el espectador, hasta ahora receptor pasivo en su contemplación de las obras artísticas, ve potenciadas sus funciones sensoriales con mayor intensidad que nunca y se convierte en un elemento activo en la interacción de fuerzas".
La reconstrucción virtual del proyecto teórico Kinetisch-Konstruktives System de Lázsló Moholy-Nagy, pretende reivindicar y permitir la completa comprensión del modelo teatral utópico que desarrolló entre 1922 y 1928. Tras su llegada a Alemania y su contacto con diversos grupos de vanguardia, Moholy-Nagy desarrolló una variante del Constructivismo soviético en la que se acentuaba la componente dinámica de la obra artística, inspirada en el Manifiesto Realista de Gabo y Pevsner. El Sistema Constructivo Cinético supuso la síntesis perfecta de arte, técnica arquitectura y movimiento, buscando la creación de una acción conjunta que habría de interactuar con los sentidos de los espectadores. El proyecto consiste en una estructura cónica conformada por tres rampas que ascienden trazando tres rampas espirales con diferentes pendientes. El eje de la propia estructura se inclina respecto a la vertical para reforzar el dinamismo y la inestabilidad de la composición. Moholy-Nagy describe en Von Material zu Architektur, el número catorce y último de los Bauhausbücher, el funcionamiento del dispositivo:
"La estructura comprende un camino exterior ascendente en forma de espiral, destinado al público en general y por lo tanto protegido por un pasamanos. En vez de escalones, tiene forma de rampa. El camino termina arriba en una plataforma semicircular que tiene salida a una caja de ascensor. La parte superior de la plataforma está articulada, mientras que la parte inferior termina en una plataforma horizontal que permite al público salir por una escalera descendente. La plataforma horizontal en forma de anillo se desliza hacia abajo con respecto al ascensor y por medio del giro total de la estructura. Su campo de acción es la espiral interior. Paralelamente al camino exterior hay otra espiral, que tiene la máxima pendiente posible, para uso de los visitantes más atléticos. A diferencia del camino exterior, ésta no tiene pasamanos. Sobre la plataforma superior destinada al público hay un plano horizontal en forma de tres cuartos de anillo, donde termina “el camino de los atletas”, y que se comunica con una barra vertical paralela al ascensor. Esta barra, por medio de un dispositivo flexible, puede moverse a cualquier punto de la superficie superior en forma de anillo, y también puede ser desplazada a cualquier punto del piso inferior de la estructura. Las figuras indican la escala, y las flechas la dirección de movimiento".
Este proyecto se concibió como la materialización utópica de los principios del nuevo teatro de vanguardia que el propio Moholy-Nagy había formulado durante su período docente en la Bauhaus, agrupados por el concepto de Teatro Total y que dieron lugar a proyectos tan conocidos como el Teatro Total de Walter Gropius y Erwin Piscator o el Kugeltheater de Andor Weininger.
Sin embargo, el proyecto de Moholy-Nagy, permaneció como un elemento utópico, escasamente estudiado y difícilmente comprensible. De este proyecto existe únicamente una pintura esquemática y un breve manifiesto que publicaron Lázsló Moholy-Nagy y Alfréd Kemény en Der Sturm en 1922 bajo el título Dynamisch-Konstruktives Kraftsystem y una elaboración posterior bajo el título Kinetisches-Konstruktives System. Bau mit Bewegunsbahn für Spiel un Beförderung, realizada por László Moholy-Nagy e István Sebök en 1928, con los que resulta difícil comprender las implicaciones espaciales y funcionales del proyecto.
Para ello la reconstrucción del modelo ha pretendido dar escala y forma a la estructura, buscando introducirse en el espacio generado y aprehender el concepto espacial formulado de manera esquemática. En el proceso de investigación resultó esencial la perspectiva paralela oblicua realizada por István Sebök, conservada en la Theaterwissenschaftliche Sammlung de la Universidad de Colonia, con una asombrosa precisión y destreza, que permitió extraer de ella todos los datos precisos para el trazado completo del modelo. En primer lugar se trata de una perspectiva militar como deduje del trazado vertical de los soportes de las barandillas, lo que permitía tomar medidas en verdadera magnitud sobre el plano del horizontal y tomar medidas considerando una reducción a 2/3 en el eje vertical. Sin embargo el trazado oblicuo de la generatriz del cono esviado que conforma la pieza, complicaba el trazado, para lo que fue esencial el estudio realizado por el arquitecto y profesor de la Rhode Island School of Design Peter Yeadon, que tras elaborar una serie de hipótesis confirma la inclinación del eje en torno a 60 grados. Conociendo la altura total y las dimensiones horizontales quedaba por determinar si las pendientes de las rampas serían uniformes o variarían a lo largo del trazado. Tras realizar esquemas de ambas hipótesis y superponerlas con el dibujo, el trazado resulta mucho más preciso al emplear una pendiente variable, lo que dificulta el trazado y es otra muestra de la extraordinaria destreza del dibujo de Sebök.
El proyecto utópico de Moholy-Nagy no pretendía definir una solución técnica, estructural o funcional de un edificio, sino únicamente formular una experiencia sensorial que podría dar lugar a una nueva forma de entender el teatro y modificar la relación del espectador con la obra artística, que es también la razón de ser de mi interpretación del dispositivo en el Sistema [re]Constructivo Dinámico.