Una casa más larga que ancha. En los dos extremos orientaciones opuestas norte y sur. Se trata de un primer piso con amplias zonas verdes en su exterior. Árboles de hoja caduca que protegen de la luz en verano y que permiten que pase en invierno.

La intervención tomó su longitud como referencia para su distribución. Las dos habitaciones se situaron en la fachada norte y la pieza de baños, almacén y lavandería las separa del amplio espacio de cocina y salón.

La manera de construir, las alturas de los pasos y carpinterías, los tonos y brillos de los distintos materiales, pretenden hacernos viajar al pasado y recordar esas arquitecturas de 1900.