El planteamiento inicial de la escuela emula la tipologia urbana de los edificios circundantes generando asi un volumen exento dentro de la parcela.
Haciendo uso de una idea abstracta de “compacidad” el nuevo colegio potenciará la interacción entre cursos y facilitará la circulación, a la vez que creará una imagen exterior sólida representativa de los valores tradicionades de dicha institución. La idea de compactación nos permite liberar el máximo de superficie de solar para las pistas deportivas y zonas de recreo al aire libre, a la vez que hace necesario la creación de “perforaciones” para la correcta ventilación e iluminación de aulas, oficinas y espacios de circulación. Estas perforaciones, resultado del vaciado de un sólido, se convierten en espacios singulares que dotarán al edificio de una complejidad volumétrica, convirtiéndolo en una macla de espacios “solido-vacío” entrelazados. Los patios resultantes de la perforación del volúmen, adquieren una condición espacial particular convirtiéndose en habitaciones sin techo, que podrán usarse como aulas para impartir clase al aire libre.
La celosía exterior rodea al edificio a modo de velo, tamizando la luz solar hacia el interior del edificio y dejando entrever el exterior. Protege las ventanas de las aulas de la radiación solar directa a la vez que deja pasar la luz indirecta y genera un espacio activo entre el cerramiento interior y el velo por el cual se hacen los recorridos evacuacion de la planta primera.
El hecho de compactar la escuela responde también a un hecho constructivo y de ocupación, ya que admite la posibilidad de cambiar interiormente de uso las dependencias sin alterar la estructura y realizar obras de ampliación aumentando módulos estructurales. La ampliación prevista para el edificio seguiría el sistema ya establecio en este; compactación y vaciado, siendo así muy facílmente ampliable sin alterar la funcionalidad y la apariencia del edificio ya existente.