Contexto

La plaza Gernikako Arbola de Urretxu se encuentra al sur del casco de Urretxu, y funciona como nexo y apertura entre el núcleo histórico y el nuevo desarrollo urbano de la villa. En la actualidad la plaza fracasa en su función de resolver las conexiones entre los distintos ámbitos y (des)niveles que la rodean. Son objeto de la propuesta una serie intervenciones encaminadas a subsanar dichas deficiencias, así como la cubrición parcial de la plaza, destinada a facilitar el desarrollo de actividades a lo largo de todo el año.

Estrategia

La intervención se propone como un espacio longitudinal de conexión entre dos ámbitos mucho más estáticos, generando un espacio cubierto de unos 500 m2 que pueda ser vivido sin ninguna traba a la hora de su uso. Un espacio cubierto y abierto al mismo tiempo.

Materialización

La cubierta se presenta como un conjunto de nubes suspendidas de pórticos adosados a las fachadas de los edificios existentes para aprovechar las líneas de carga preexistentes y no crear ningún apoyo superficial en la plaza. Así se contraponen dos lenguajes: uno que acompaña al ritmo rígido establecido por las fachadas de los edificios, formalizado por una sucesión de siete pórticos; las nubes colgarán de dichos pórticos por medio de cables de acero inoxidable, contraponiendo su geometría azarosa e inmaterial a la del entorno.

La opción por una solución ligera y translúcida (bastidores de madera revestidos de paneles de policarbonato) permite captar iluminación natural durante el día, reforzando la idea de espacio abierto. Así mismo, se piensa en que la misma cubierta pueda ser luminosa por la noche.