Hemos querido, con una mirada curiosa como la de un niño, conocer y aprender de este barrio y a su vez enseñar a las generaciones más jóvenes el patrimonio que existe en esta ciudad. El Cabanyal ofrece numerosas características y propiedades singulares que, a veces, por el mero hecho de tenerlas cerca, pasan desapercibidas. Estos juegos ofrecen una manera de volver a mirar el barrio para el que ya lo conoce, o de conocerlo para el que todavía no lo ha visitado.
Aprendiendo del Cabanyal son dos juegos. Para la realización del primero retomamos los recortables de la colección La cacerola abollada [realizados para la IV Edición de Cabanyal Portes Obertes del año 2001, autores Silvia y Javier Molinero], para el segundo buscamos un juego de mesa destinado a público infantil que enseñara el patrimonio del barrio del Cabanyal de Valencia.
Recortable:
Tras varias pruebas, el proceso creativo nos llevó a diseñar un recortable que añadiera, a la propuesta que realizamos en 2001, la posibilidad de construir una manzana típica del Cabanyal. La colección anterior proponía construir una vivienda, a escoger entre unas 10 posibles, y esta vez quisimos potenciar uno de los
valores que posee este barrio, su configuración urbana, por lo que el recortable te permite construir un modelo de manzana y si se plantea la actividad en el aula de un centro escolar, la posibilidad incluso de construir un barrio.
Retallable Cabanyal son 3 láminas de tamaño A-3. La lámina número 1 incluye la base sobre la que construir la manzana, el listado de 27 edificios emblemáticos del barrio junto a sus descripciones principales y algunas fachadas en blanco para que las niñas y niños a partir de 5 años, destinatarios principales de este juego, puedan pintar libremente y añadir. La hoja número 2 incluye el prisma sobre el que añadir las fachadas de
las casas y la lámina 3 contiene las fotografías a color de las fachadas de los 27 edificios.
Baraja:
Con respecto a la segunda propuesta, quisimos diseñar un juego con el que se sintieran familiarizados actualmente y observándolos coleccionando e intercambiando cromos a la salida del colegio, pensamos en una baraja cuyas cartas estuvieran protagonizadas por algunos edificios del Cabanyal. Baralla el Cabanyal se basa en aquellas cartas temáticas de hace algunos años sobre coches, aviones, motos o superhéroes donde conocer características descritas en la propia carta te ayudaban a ganar la partida. En el caso de los vehículos se describían los kilómetros por hora, la cilindrada o el tipo de motor y en el caso de los superhéroes la velocidad, la altura, el peso, la fuerza o las peleas ganadas. En nuestro caso el año de construcción, la superficie construida, el número de plantas y la distancia hasta alcanzar el mar, son las características que se describen en las 32 cartas que conforman la baraja.