Cuenta la historia un desengaño entre un barrio y un monte........DESENGAÑO nº 12

Cierto es, que el paso de los años ha separado físicamente al Barrio de San Antón  del Monte del Benacantil. San Antón, conservador y tradicional, vive de espaldas al Castillo, al  pie del Benacantil, ajeno a todo lo que transcurre a su alrededor.

La recuperación del entorno del Castillo de Santa Bárbara y la atención prestada al monte y su entorno, tal y como expresan los nuevos Planes de actuación, están alentados por una voluntariedad cultural.

Más que ser  presos de normativas militantes, de aplicaciones concretas y rígidas, estos planes  actúan en una dirección, hacia la búsqueda de un  “resultado global” y con doble sentido. De dentro a fuera, de fuera a dentro. Un trabajo de ida y vuelta.

 “El enfoque general del Plan Especial de Protección del Castillo de Santa Bárbara se aleja de los postulados normativos y de preservación que ha venido siendo tradicionales, alentados exclusivamente por una voluntariedad cultural “.

  El proyecto requería una doble visión y una trabajo de cambio de escala constante. La percepción del solar nº 7 desde el Castillo, como uno más entre todos los solares del Barrio de San Antón, y la percepción como usuarios de las dos viviendas sitas en la Calle Desengaño nº 12.

 ESCALA DE BARRIO/ESCALA DE CALLE

La visión “real” desde el Benacantil,  es un paisaje de retales de cubiertas, formas irregulares contenidas en manzanas alargadas que caracterizan el tejido urbano del  Barrio de San Antón. Controlar la altura y dar forma a la cubierta, con el fin de no sobresalir del manto  y terminar de hilar el tejido, ha sido el objetivo para preservar la protección visual y la imagen histórico –cultural  del Castillo. 

Se opta por una cubierta inclinada-quebrada, que envuelve el espacio habitable. Se trabaja la cubierta como fachada, pero siendo conscientes de su percepción desde la distancia. Escala de barrio. La cubierta es una lengua texturada, continua, cuyo fin es  atar el volumen emergente .

La textura de color arranca con una inclinación, mancha la vertical, vuelve a quebrarse, se transforma en la fachada del ático y termina convirtiéndose en un banco de la terraza del ático.

En ocasiones la textura se introduce en el espacio habitable, por el patio, por el tragaluz, en el zaguán……Pero sin llegar a revestir la fachada, al considerarse un acabado muy brusco para la escala de calle del barrio.

 FACHADA

La fachada se resuelve con una textura homogénea (monocapa) de color amable, compartiendo calle con el resto de edificios vecinos, y sin estridencias. Un vacío en el cerramiento de planta baja permite que se ventile el semisótano y el pequeño espacio común a cota +0.00 para bicis, carritos de niño, etc. Se materializa este retranqueo con una reja de montantes verticales de acero y madera que acaban subiendo hasta planta primera y convirtiéndose en elemento de protección del hueco de balcón de la habitación de la vivienda A. 

DOS VIVIENDAS EN LA CALLE DESENGAÑO 12

Se analiza  la tipología existente en el barrio y se revisa la normativa.

La peculiar forma de los solares, irregulares, de gran profundidad edificable, situados en calles de acusadas pendientes, de ancho de fachada mínimo e incluso algunos por debajo de estos mínimos como es nuestro caso, complica la distribución interior de las viviendas.

En nuestro caso se decide abrir un patio interior de frente mínimo 3m, lo estipulado en normativa, al que se volcará una única vivienda, la vivienda TIPO A con una superficie total de 78,48m2 útiles.

Dada la estrechez de la calle Desengaño (apenas 4m) y la escasa intimidad que  esta distancia provoca  con el vecino, se precisa de  un salón más íntimo y de mayor calidad en su cotidianidad.  Por ello, el salón-comedor de esta vivienda (A), se abre totalmente al patio interior y privado, permitiendo esta privacidad acristalarlo en su totalidad. La altura del patio son 6m, lo que permite una gran entrada de luz,  estando además orientado a sureste, al que contrario que la fachada, a norte.  De esta manera  se integra también  el espacio ajardinado del patio al salón (una terraza directa). Existe una relación visual a través del patio entre el comedor y la cocina.

Una grada de madera, que se funde con el mueble librería, alacena.....ect., que forra la pared, nos lleva del salón a la cocina, ubicada a una cota más baja (cota +0.00).

Cocinando podemos alargar la mano y atrapar las macetas del patio, el patio nos hace de alféizar de la ventana de la cocina. Todos los espacios, incluso los de paso, acaban siendo algo “más”..... La escalera, como objeto-mueble se ubica frente al acceso, se ilumina a través del TRAGALUZ, que al tiempo cualifica a todo este espacio con una perfecta ventilación cruzada. Entrando al exterior salimos al tragaluz, y encontramos una escalera que potencia más todavía la proporción alargada de este espacio. A través de esta escalera llegamos a la terraza de la vivienda A, relacionada con sus espacios habitables mediante el patio.

La vivienda de ático (B) cuenta con un espacio a dos alturas pero visualmente relacionado. Se accede a cota +4.56 y se sube hasta la cota +6.08, en la que se ubica la cocina-comedor, relacionados con la terraza exterior. Metro y medio por encima se ubica el salón, un dormitorio y el baño (+7.56). Desde el salón se tiene una relación visual; bajando la vista con la  con la terraza, alzando la mirada, un lucernario por el que asoman las flores de la cubierta ajardinada, y a la misma cota, con el tragaluz .

El juego de forjados y escaleras  genera una relación de espacios que los cualifica visual y funcionalmente.