Recibimos el encargo para realizar la escenografía del espectáculo A Outra Realidade; un recorrido mágico a través de la ciencia, de la historia y del humor ideado en el laboratorio de Martín Camiña.
En las primeras reuniones, se nos comenta que el espectáculo es un recorrido en el tiempo, con la ciencia como hilo conductor, con mucha presencia de artes plásticas y la música como fondo... - todo cosido con la aguja del ilusionismo.-
Los condicionantes de partida impuestos por el ilusionista y por el director teatral, Marcos Orsi, pasaban por la versatilidad de la escenografía para adaptarse a la trama, además de dar acogida a los distintos actos en la misma.
Un pequeño escenario elevado en el que se situará la música, la arpista Marta Quintana. Un baúl que además de recoger los diferentes instrumentos que se emplearán en la representación sirva para el transporte de la obra así como para darle distintos sentidos dentro de la obra escenografía. Mesa y bancos en los que se harían los juegos de magia.
Y los elementos deberían dar respuesta a las diferentes necesidades:
Los componentes de la escenografía tenían que ser móviles y flexibles, y permitir con pocas piezas llenar escenarios de muy diversos tamaños. Deberían ser fácilmente transportables pues las actuaciones podrían realizarse en diferentes lugares da geografía española. Todas las piezas debían ser lo suficientemente neutras para adaptarse a las distintas épocas por las que transcurre la acción.
Nuestro objetivo es que la pieza a proyectar tenga relación con el guión y la teatralidad de la obra, y forme parte activa del espectáculo.
La respuesta son tres piezas que permitan la fusión en un solo elemento procurando así la centralidad de la escena. O que las partes se dilaten y se extiendan, de manera que se adapten plenamente espacio escénico, y que llenen o liberen el espacio según las necesidades del momento de la obra en el que nos encontremos.
El resultado del trabajo dan como resultado el Círculo Mágico, una pieza cilíndrica troquelada por un Trisquel que lo divide en las tres partes que componen el espectáculo: música, artes plásticas y ciencia, unidas mágicamente.
De este modo la música se alberga en un pequeño escenario del que surge una escalera. Las artes plásticas se recogen en un baúl, reflejadas en las formas de su tapa. La ciencia se muestra en la obra con unos mecanismos eléctricos que sirven como interruptores del hilo conductor de la obra teatral. La mesa y los bancos son el nexo de unión de la trama ilusionista.
En definitiva el Círculo Mágico cumple con todos los requerimientos escenográficos (movilidad y versatilidad), y practicidad (fácil transporte y almacenamiento), formando parte activa de la teatralidad dándole sentido en su configuración a la Magia como nexo de unión.