La propuesta trata de dar respuesta a la cobertura de un espacio de juego situado en el parque de Atxuri, sobre la explanada del polideportivo. La morfología del espacio de juego con forma de herradura-, su situación en el parte baja del parque y la existencia de edificación bajo rasante -piscina del polideportivo- marcan la actuación.
La nueva cubierta busca su integración en el entorno, cuidando la escala de la pieza, y trabajando para ello en aspectos como la ligereza de la estructura, la transparencia de la cubierta y el color del cerramiento de fachada. La definición geométrica de la cubierta parte de la planta de “herradura” y se completa mediante la generación de un frente que de alguna manera dialoga con la pieza existente frente al polideportivo y que alberga canchas de baloncesto y fútbol. Este frente, con las esquinas ligeramente redondeadas, vuela desde la zona de juego hacia la plaza y se alza ligeramente, abriéndose así a la ciudad e invitando a entrar.