El proyecto consistirá en un estudio socioeconómico de la evolución del modelo arquitectónico desde los comienzos de Manhattan, en el que se estudiará cómo la situación social de la época/zona y la cultura de por aquel entonces influyen en la concepción de una arquitectura que parece haber dejado de lado su carácter humano en pos de un nuevo modelo social impersonal y que parece apartar la vista de los problemas que acometen a nuestro tiempo.

El resultado buscará entender hacia dónde debe evolucionar la arquitectura de las próximas décadas, ver que malas decisiones se han llevado a cabo, cuales han sido correctas y a que problemas nos enfrentamos si seguimos apartando la mirada hacia otro lado, para no repetir los errores ya cometidos en el pasado.