INTRODUCCIÓN:
Arteixo es una villa gallega, situada en el Noroeste español. Con una población de aproximadamente treinta mil habitantes, aglutina el cuarenta y cinco por ciento de la economía gallega en el polígono de Sabón que con más de tres millones de metros cuadrados y unas cien empresas de relevancia mundial, convive con la zona urbana separado tan solo por la carretera nacional que conecta A Coruña con Carballo.
El crecimiento en dimensión y la especialización de las partes que la conforman, ha provocado que Arteixo haya ido alejándose del medio natural que le ha dado origen y sustancia, a la vez que una comunidad humana dedicada a la agricultura, daba paso a grandes espacios de infraestructuras al servicio único de necesidades logísticas, empobreciendo de esta forma la calidad y cualidad del espacio de la ciudad como hábitat donde desarrollarla riqueza y complejidad de la vida humana.
“Conocer el pasado, para entender el presente y así poder mirar hacia el futuro” este es el lema con el que emprendemos nuestros proyectos y estrategias. En Arteixo nos preguntábamos ¿por qué de un núcleo rural dedicado a la agricultura se generaba esta nueva configuración urbana? ¿qué había pasado para que el vivir y el trabajar fueran totalmente autónomos? ¿cómo eran posibles dos realidades tan diferenciadas tan solo separadas por un vial de seis metros? ¿y cómo era posible que la zona urbana desconociese totalmente la zona industrial y esta a su vez desconociese la propia villa en la que se asienta?. Respondiéndonos a estas preguntas establecemos un claro objetivo: intentar hacer vividero el polígono industrial y mostrar en la zona urbana lo que allí se produce, ¿y cómo hacemos esto? Y esta última cuestión es la que nos lleva a plantearnos ARTEIXOworks.
ANTECEDENTES
Nos encontramos en una villa Gallega desvinculada totalmente de su origen agrario y en la que el transcurrir de los años ha hecho que se divida en dos partes sin contacto entre ellas. Ante esta realidad nace nuestro desafio: ¿Cómo hacer ver en el casco urbano, que uno de los polos de producción más importantes de España está a ton sólo seis metros?, ¿cómo podemos unir estas dos realidades que el tiempo y la historia a llevado a separar totalmente?
Planteamos hacer una acción ciudadana en la que lo que Arteixo produce se mostrase en donde Arteixo vive.
Para ello nos intentamos poner en contacto con todas las industrias que se asientan en el polígono, para pedirles materiales que pudiesen invadir el casco urbano, con esta acción llevaríamos la producción de la industria al centro de la villa.
Obtenemos de distintas empresas, distintos materiales, materiales diversos (neumáticos, cajas, bolsas, litros y litros de leche, sacos de cemento, botes de pintura, perchas) ¿qué nos proponemos hacer con estos productos?, intentaremos crear ejércitos de color que invadan los espacios vivideros de Arteixo.
Para poder seguir realizando la acción, necesitábamos que los habitantes del lugar colaborasen con nosotros, colaborasen invadiendo sus calles, plazas, parques y playas con los productos obtenidos de la industria.
RESULTADOS
Con esta acción se ha conseguido la colaboración entre los ciudadanos y la zona industrial, se ha conseguido tener una nueva visión de Arteixo, un Arteixo productivo. Y se han dado a conocer las empresas que allí habitan y lo que producen en el propio lugar. Se ha conseguido una visión de la globalidad de Arteixo, se han eliminado las fronteras impuestas por la historia.
CONCLUSIÓN
Cuando llegamos a esta villa, más de la mitad de la población desconocía lo que a seis metros de allí se producía, después de esta acción podríamos asegurar que el noventa por ciento de sus habitantes conocen los productos que salen de su villa.
DISCUSIÓN
Hemos sembrado una pequeña semilla en Arteixo, hemos logrado comprender la totalidad del lugar, pero esto es sólo un pequeño paso, en esta villa es necesario recorrer un largo camino para que su zona industrial deje de ser un bastión defensivo y se convierta en un espacio vividero para los ciudadanos. Hemos empezado un camino que serán necesarios años para poder recorrerlo, ahora que conocemos la realidad, nos toca mirar al futuro ¿cómo podríamos humanizar tres millones de metros cuadrados industriales? ¿cómo seríamos capaces de incorporarlos a la vida urbana?, estas son las cuestiones que esperamos poder desarrollar en un futuro.