En ellos se señalan lugares clave, se visibilizan conflictos, se conocen de primera mano alternativas a las prácticas urbanas normalizadas y por encima de todo se les pone cara a los artífices, verdaderos referentes ciudadanos. Sirvan estos mapas como una guía para encontrar posibles interlocutores en nuestras derivas por la ciudad de Sevilla.
La cartografía, entendida así, es el fundamento estético para una acción política, permitiendo una visión que reconoce e incluso intensifica los conflictos y las fisuras del discurso hegemónico, escenificándolos y concediéndoles un protagonismo que les permita incorporarse al debate social. Se trata de una propuesta para reformular la concepción tradicional de los mapas convirtiéndonos en cartógrafos que evitan vivir la ciudad desde la lógica de su representación, sino que la recorren y transcriben al mismo tiempo.
Tienes en tus manos información sensible, una copia de los mapas-crónica que recogen los itinerarios de las tres primeras ediciones de Jane's walk Sevilla.
Se trata de una colección de mapas de bolsillo que se nutren de la información generada durante los paseos realizados entre los años 2014, 2015 y 2016 en el marco de la iniciativa Jane's Walk, un proyecto que parte de la idea de que un grupo de personas que no se conocen necesariamente caminen juntas por la ciudad con la excusa de conmemorar la labor de la pensadora urbana Jane Jacobs y su particular visión de la calle como institución fundamental para socializar y dotar al individuo de un sentido comunitario.
Bajo una licencia Creative Commons hemos recopilado el conocimiento aportado por más de un centenar de personas que, de forma altruista, han compartido su personal visión de la ciudad.
Estos mapas han sido editados y distribuidos entre los sevillanos, con la ayuda del Ayuntamiento de Sevilla, a través de la red de bibliotecas públicas y centros cívicos municipales. componiendo una colección de nuevos relatos, haciendo circular historias y pequeñas anécdotas que recuperan la memoria no oficial e incorporan itinerarios llenos de sentido a nuestros trayectos cotidianos por la ciudad.
Dado que las personas y los itinerarios propuestos nunca se repiten y varían de un año a otro, el interés de estas cartografías radica en registrar los paseos, dando como resultado un mapa distinto y fragmentario cada vez, muestra de una ciudad cambiante, reflejo de la complejidad urbana y de la multitud de miradas posibles sobre un mismo escenario.
En ellos se señalan lugares clave, se visibilizan conflictos, se conocen de primera mano alternativas a las prácticas urbanas normalizadas y por encima de todo se les pone cara a los artífices, verdaderos referentes ciudadanos. Sirvan estos mapas como una guía para encontrar posibles interlocutores en nuestras derivas por la ciudad de Sevilla.
La cartografía, entendida así, es el fundamento estético para una acción política, permitiendo una visión que reconoce e incluso intensifica los conflictos y las fisuras del discurso hegemónico, escenificándolos y concediéndoles un protagonismo que les permita incorporarse al debate social. Se trata de una propuesta para reformular la concepción tradicional de los mapas convirtiéndonos en cartógrafos que evitan vivir la ciudad desde la lógica de su representación, sino que la recorren y transcriben al mismo tiempo.
El movimiento del peatón por la ciudad ha sido el eje del diseño cartográfico entorno al cual se jerarquiza y articula la información en estos mapas. La escala que permite calcular distancias y tiempos a pie o el especial cuidado por la recopilación de los lugares mencionados en cada itinerario así como sus nombres propios son muestras de ello. Además en ellos se superponen y entrecruzan historias, lugares y personas, demostrando que a pesar de lo que proclama la retórica liberal, en realidad somos redes de relaciones, no individuos.
Del mismo modo que Eugenio Dittborn enviaba sus pinturas aeropostales por todo el mundo, estos mapas están siendo enviados por correo postal a los grupos motores de toda la red de ciudades adscritas a la iniciativa Jane's Walk. Mandar cartas también es un modo de trazar mapas. Es también la manera de establecer un vínculo físico, de plantear un primer acercamiento que posibilite un intercambio de ideas y preocupaciones entre realidades muy distintas.
A la pregunta de qué sentido tiene conectar actividades locales a nivel transnacional, hemos entendido que existen no una sino multitud de culturas urbanas distintas y sólo resaltando las especificidades concretas de cada una es posible caracterizarlas encontrando similitudes y afinidades entre ellas. De esta forma es realmente posible exportar actitudes, procedimientos o metodologías de un contexto a otro generando ideas nuevas.