· El gabinete de las maravillas del S.XXI – Del coleccionismo al hiperarchivismo
En el siglo XVI aparecen los primeros gabinetes donde se coleccionaban y exhibían objetos exóticos. Ahora las imágenes son objeto de consumo de nuestras colecciones. ¿Cuáles son los efectos de las transformaciones de la materialidad en las formas de coleccionar? En un documento de sección se explora la combinación de las arquitecturas del Círculo de Bellas Artes ubicado en Madrid y la Casa-Museo de Sir John Soane en un ejercicio de cadáver exquisito.
· La deriva virtual – El nuevo flâneur
Las redes sociales redefinen el espacio físico, permitiendo la construcción subjetiva de espacios, donde comisariamos nuestra identidad. Esta intervención se enmarca en el contexto del Salón del Prado, un lugar histórico de paseo e interacción social. El Salón del Prado son las nuevas redes sociales.
· La fábrica del selfie – Auto-exposición digital
La cultura de la transparencia conduce al placer de la auto-exposición. Se utiliza el Media Markt de Plaza del Carmen para testar esta situación. El Media Markt, contiene el Gran Frontón Central de 1899 que encuadra el nuevo muro cortina escaparatista del nuevo comercio, proponiendo una tramoya en su interior.
· El tocador mediático – Nos renderizamos
En 2012, los Cines Luna se reprogramaron dando espacio a un nuevo complejo de ocio, un espacio de culto y cuidado del cuerpo. Se propone una especulación que reinterpreta el interior de los Cines Luna transformándolos en una matriz que espacializa cada uno de los filtros de las redes sociales desde donde reformamos nuestro cuerpo, nos renderizamos y auto-diseñamos, exponiendo nuestra imagen ideal en los escaparates digitales.
· Somos Spam – El cuerpo hiper-real
Nos identificamos con avatares que nos representan en el mundo virtual y nos permiten desplegar nuevas formas de ser mediante una identidad múltiple. Un cuerpo hiper-real que al igual que el Spam, esa carne sintética enlatada, que dio nombre a los emails no deseados, sirven para definirnos desde lo híbrido. Se proyecta en el patio interior de acceso al Museo de Cera de Madrid, un proceso de producción y cadena de montaje de avatares.
· El Bazaar gatuno – La memoria fake
¿Cómo se constituye el imaginario actual? Si la memoria que ya no se formaliza en singularidades físicas, sino que ha sido reemplazada por su representación virtual. El Bazar gatuno (haciendo referencia al gentilicio madrileño) materializa y recopila los elementos simbólicos que se encuentran en la ciudad, componiendo un monumento de monumentos. Una estrategia de reconquista y reubicación de objetos relegados a su representación.
· De la taxidermia a mis stories – Lo real en tiempo real
La cultura del archivo es producida por la memoria y destinada a permanecer eterna. Ahora está basada en el proceso mutable: lo virtual se compone de representaciones y simulaciones de lo real, en tiempo real. La traslación de las stories es un acontecimiento efímero en el Museo Arqueológico de Madrid que durará 24 horas. La evanescencia es capturada. El globo se alza y desvanece la memoria perdida. Lo perdido se conmemora y se emite, pues en una época sin consistencia ni duración, parece anunciarse la muerte del recuerdo.
· Rito a Siri – El conocimiento a tu alcance
Si las antiguas colecciones permitían el orden del conocimiento. ¿Cómo se establece en la actualidad?
El Museo del Prado ha incorporado una nueva tecnología de visionado en streaming por Instagram de las obras que contiene. Ya no hay cola por entrar en el Museo del Prado, hay cola virtual. Se propone materializar el efecto de la cola virtual mediante una suerte de indicadores que articulan el espacio de entrada del Museo.
· My cama es el mundo – El recluso contemporáneo
Esta intervención explora cómo el grado de privacidad en el espacio tradicional y el de exposición han sido invertidos. La privacidad es pública y publicada. La cama enlaza la intimidad con la esfera pública, es el vínculo físico-virtual. Ya no es tanto un sitio para descansar, sino desde donde se actúa e interactúa. La respuesta que se plantea es un nuevo refugio, un portal físico-virtual hermético y público; el módulo mínimo para el nómada virtual.
· De Colin Rowe a Google – Panóptico digital
Esta intervención examina los procedimientos de vigilancia que infiltran nuestro entorno contemporáneo. El paisaje cotidiano se monitorea a través de sistemas de control urbano como un panóptico digital. Para esta intervención se remapea la Plaza digital de Sol por ser la más vigilada de la ciudad. Este espacio urbano se redibuja mediante la información online.

Todas estas intervenciones reflexionan en torno a uno de los atributos del arquitecto que es cargar el mundo físico de nuevo sentido para que pueda seguir siendo apreciado de manera acorde a la evolución de la sensibilidad y de los valores de la sociedad en cada momento. Ante un mundo que se ahoga en la compleja fluidez de la materia, se propone un proyecto alternativo desde donde podemos imaginar la ciudad a través de la articulación conceptual de la realidad. De manera que los dibujos no describen una solución óptima, pero si un instrumento que define características de la condición contemporánea, al mismo tiempo que construye un dispositivo de discusión teórica.