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El proyecto es un homenaje al clima mediterráneo. Se trata de una instalación que pone en valor el rol de la persiana mediterránea cómo uno de los mecanismos más ingeniosos, sencillos, y eficaces para protegerse del sol. El proyecto consiste en levantar una persiana monumental. Una persiana urbana, que, en lugar de proteger una ventana, cubre toda una plaza, y en lugar de resguardar a un sólo individuo, congrega a toda una comunidad. Durante todo un mes, numerosas actividades, eventos, y exposiciones tienen lugar bajo esta gran sombra suspendida en el aire, reactivando la plaza, y devolviéndola a la escena pública.

 

La persiana es más que un elemento arquitectónico, es un símbolo cultural. Consiste en una respuesta muy particular a un clima muy particular. Por tanto, no es casualidad que numerosas ciudades del sur de Europa, que comparten clima, y, a veces mar, hayan adoptado esta solución para protegerse de las altas temperaturas. Esto explica por qué en España las conocemos como alicantinas, y en Italia como venecianas. Sin embargo, desde la irrupción de sistemas mecánicos que permiten controlar el clima, como el aire acondicionado o el ventilador, las persianas han caído en desuso. En un contexto actual de crisis climática y energética, conviene revisar el impacto medioambiental de los espacios que habitamos. Impactos que van desde el consumo energético de nuestras viviendas, hasta las emisiones que resultan de la extracción de los materiales con los que construimos.

 

El pabellón se ubica en la plaza Músico López-Chavarri, en el histórico barrio del Carmen de la ciudad de Valencia. La plaza no es un espacio “diseñado” ni “planeado”, sino que es el resultado de la demolición de un edificio de viviendas anterior. Tal vez eso explica las carencias del lugar; la falta de sombra, mobiliario, vegetación y agua. Es un espacio por donde la gente transita, pero no permanece. Además, en los balcones de los edificios que la rodean, se pueden observar dos cosas. La primera, es la cantidad de carteles de los vecinos reclamando un futuro alternativo para la plaza. El segundo, son todas las persianas que protegen las ventanas. Precisamente es en la integración de ambas ideas, donde surge la idea principal.

 

El pabellón consiste en dos pórticos triangulares de madera que permiten descolgar una larga persiana alicantina, también de madera, en forma de catenaria. El color verde oscuro, responde a uno de los cinco colores tradicionales en los que se suele fabricar las persianas de esta región. Una apertura circular en la catenaria alumbra un pequeño jardín interior, construido con vegetación y tierra del propio solar, que contribuye a atemperar el clima del final del verano. Una serie de piedras, que además de servir como contrapeso actúan como mobiliario, congregan a las personas tanto por el día como por la noche. La sombra rasgada que proyecta permite configurar un espacio público al fresco”, donde un programa público con numerosas actividades invita a los vecinos a descubrir y reinterpretar los espacios olvidados y escondidos de la ciudad.

 

La práctica totalidad del proyecto está construido con materiales preindustriales, naturales, y de kilómetro cero, con mano de obra local. De esta forma, la estructura de madera nos conecta con los bosques de pino en Soria, las persianas con la localidad de Sax, en Alicante, y las piedras con las canteras de Teruel. El proyecto busca promover una economía circular y local en la región en la que se encuentra. Materiales sostenibles y certificados como la madera, contribuyen con un impacto ecológico positivo, gracias al Co2 almacenado y capturado en los bosques de proximidad. El pabellón se construye mediante módulos pre-ensamblados en taller, reduciendo así los costes, plazos, riesgos, y ruidos. Tan importante es el lugar de donde proceden los materiales, como los lugares a los que se destinan.  Por tanto, el proyecto plantea la recirculación total de sus componentes: la madera retornará a la industria, las piedras a la cantera, la vegetación al vivero y las persianas se donarán a la comunidad, como testigo póstumo de lo que una vez tuvo lugar en esta desapercibida plaza.

 

  • Información
  • Autoría

    Clasificación / Tipología

    Proyectos temporales

    Ubicación

    Plaza Plaza Músico López-Chávarri
    46003 Valencia | Valencia
    VALENCIA | ESPAÑA

    Otra información

    Fecha Inicio: Setiembre 2023
    Fecha Terminación: Octubre 2023
    Superficie construída: 280
    Coste/m2: 357

    Agentes

    Constructor: Sido Madera

    Estructuras: Juan F. De la Torre

    Fotografía: Luis Díaz

  • Premios y distinciones
  • Premio TAC! Festival de Arquitectura Urbana

Participaciones en arquia / próxima

IX Edición 2022-2023 [Seleccionada]