El encargo consistía en ampliar la habitación de matrimonio de esta casa unifamiliar aislada en una urbanización ciudad-jardín en Valldoreix. Esta premisa sirve como punto de partida para replantear la relación entre la vivienda y el jardín circundante, en especial la cara sur que no aprovechaba las grandes condiciones del lugar y de su orientación. En este sentido, la propuesta convierte una pequeña ampliación de 10 m2 en una oportunidad para la reinterpretación de la casa, el entorno y el uso doméstico de sus habitantes.
El proyecto propone una gran terraza en la primera planta como extensión de la habitación y de la sala-comedor (que apenas disponía de un pequeño balcón) a la vez que actúa como un gran porche para la planta baja. Al mismo tiempo, la cubierta de la habitación se ha tratado como otra terraza-mirador que ofrece unas vistas privilegiadas a Vallvidrera.
La estructura la conforman una pauta de perfiles metálicos IPE que se adaptan a los forjados existentes de la casa y a los límites edificables del jardín, permitiendo prolongar la superficie de la vivienda a través de una serie de situaciones que suponen nuevas maneras de habitar en los espacios intersticales que se generan. Los perfiles metálicos también sirven de subestructura para posibles pérgolas o telas para garantizar un control climático de estas terrazas.
Finalmente, aparece una capa vegetal que ayuda a proteger el exceso de radiación en verano, permite la prolongación del jardín en los espacios intersticiales y facilita una mayor privacidad con los vecinos de enfrente. Estas capas vegetales se resuelven con un entramado de mallazo, que también sirve para configurar las barandillas de las terrazas y la escalera, y favorecen la verticalidad de las glicinias y la viña verde.
El crecimiento de las plantas disuelve las propias estructuras que pasan a un segundo plano y el proyecto se convierte en una propuesta de jardinería. Los propios habitantes decidieron plantar un huerto y un jardín mediterraneo al empezar a habitar el exterior como extensión de su propia domesticidad.