Desde Julio de 2012 escribo para El Viajero (El País) sobre la arquitectura de la ciudad de Nueva York. Son historias que hablan de la economía del compartir, de instalaciones efímeras, nuevos paradigmas para instituciones culturales, o visiones apocalípticas para Manhattan. Curiosamente, los editores nunca etiquetan mis artículos como "arquitectura", sino como "turismo" "viajes" "cultura" o "américa". Me gusta pensar que esta es mi pequeña contribución a la desmitificación el discurso arquitectónico o, mejor, una oportunidad para introducir cuestiones políticas en las guías de viajes. La entrada sobre Nueva York, en la guía de El Viajero 2014, habla de las arquitecturas que celebran la libertad y su estrecha vinculación con la guerra.