A lo largo de la historia, los avances en la comunicación han ido asociados a los cambios que han experimentado las ciudades y sus sistemas económicos. Al igual que la revolución industrial marcó un salto en el desarrollo urbano, las nuevas comunicaciones en la era digital son un factor determinante en la transformación de las ciudades.

Los avances tanto en las vías como en los medios de comunicación de las ultimas décadas han potenciado la conectividad de individuos, su libre circulación e intercambio masivo de información. Esto ha dado lugar a la globalización[1],  y a la aparición de una nueva forma de nomadismo vinculado a lo digital .

Internet ha dado lugar en el siglo XXI a posibilidades antes impensables en el sistema económico capitalista, como la aparición durante la reciente crisis de sistemas económicos colaborativos donde emergen nuevas prácticas como Cohousing, Coworking y Coliving y que pueden afectar a la forma de entender la ciudad.

Nueva York es el mejor ejemplo de smartcity, uno de los modelos de ciudad conectada que responde a las demandas del nuevo estilo de vida que surge con los nómadas digitales dado a su buena comunicación, disponibilidad 24/7 y a la gran oferta de oportunidades de emprendimiento.

En una de las primeras ciudades donde están apareciendo estas nuevas prácticas de habitar, se pueden observar las nuevas comunidades que se han generado y la proyección de futuro de la ciudad hacia el reciclaje urbano a través de espacios colaborativos.

El objeto de la investigación será estudiar y experimentar estos nuevos modelos de habitar dirigido al modelo de ciudad inteligente como es Nueva York, adaptado al nuevo perfil  de nómada digital, estudiando en profundidad los espacios colaborativos, sus distribuciones, localizaciones, su programa abierto y sobre todo sus usuarios.