La presa se enclava en la encrucijada de Cáceres, Badajoz, Toledo y Ciudad Real. Está situada en un estrechamiento entre las sierras de La Lobera y La Rinconada denominado Portillo de Cíjara. El diseño de las presas requiere de muchos esfuerzos durante dilatados plazos de tiempo. Si bien las obras se iniciaron en 1902, hasta 1934 no se activa la construcción bajo los auspicios de Indalecio Prieto, concluyendose las obras en 1956, ya bajo la denominación de Plan Badajoz. Durante esos 24 años de dilatada historia, la presa requirió diversos proyectos, desde los de Rafael de Escosura en 1921, pasando por los de Rodrigo Catena en 1932, hasta el estudio de soluciones para el aliviadero de José Joaquín Tirado en 1941. Se trata de una presa de gravedad construida con hormigón armado, de líneas puras, sin ornamentos y de eje rectilíneo. En la parte central dispone de siete vertederos de superficie y cuatro aliviaderos abiertos. La central dispuesta a pie de presa presenta dos grupos de eje vertical para el aprovechamiento hidroeléctrico.