Una mesa-jardín:
El jardín se hace mesa y las flores se elevan hasta que las manos puedan tocarlas y la vista observarlas, buscando el acercamiento de las personas con la vegetación. La mesa se perfora con grandes huecos que introducen y envuelven al visitante en su interior. Cada hueco que surge dentro de la mesa posibilita una nueva manera de ver el jardín, amen de una experiencia sensorial diferente al habitar la. El visitante se convierte en espectador y colaborador activo del escenario generado por las plantas.
Una escuela-jardín:
La mesa-jardín es una mesa de estudio en el centro de la ciudad donde además de exponer plantas hermosas, podemos entender y aprender de ellas, expandiendo su belleza al campo del conocimiento. La escuela jardín tiene además la voluntad de transmitir la esencia de la sabiduría acumulada por el baserritarra (agricultor vasco) a través de la historia.
Una sociedad de plantas amigas:
Las plantas que conforman la mesa son parejas de plantas sinérgicas, es decir, plantas que se ayudan unas a otras. La mesa- jardín, como representación de una microsociedad de plantas, la fundamos de tal manera que existan lazos de convivencia, que son a su vez, lazos de supervivencia. Las plantas amigas evitan la utilización de agentes químicos para ahuyentar insectos o mejorar la capacidad hidrológica de las plantas. Es decir, es un planteamiento hacia un ecosistema autoregulable, sin intervención humana.
PRESUPUESTO: 5800 EUROS. TIEMPO DE MONTAJE: 1 MES