El edificio, a pesar de su aspecto prácticamente cerrado al exterior, capta una gran cantidad de iluminación difusa a través de los patios interiores y de la doble galería ventilada de vidrios, protegiendo a su vez al edificio del sobrecalentamiento.

A la hora de diseñar el edificio se han tenido como objetivos compositivos la implantación de volúmenes claros y la utilización de los sistemas constructivos más racionales favoreciendo de este modo, la economía de medios, el ahorro de recursos y el reciclaje, la adecuación al solar y al entorno con soluciones y materiales adaptados al lugar y la adecuación al programa necesario y a las futuras y posibles modificaciones.

La apariencia formal del edificio, responde al planteamiento unitario y global presentado en el anteproyecto del edificio multifuncional, conservando las líneas sencillas de las tres piezas, y el protagonismo del espacio central (de construcción futura) vertebrador de la propuesta. En ella, LA UNIDAD BASICA DE SALUD ocupaba el extremo este de la pieza más larga situada hacia el norte. 
Se mantiene la compacidad del mismo, integrada con la guardería y la escuela de música, siguiendo la misma organización: grandes huecos hacia el espacio central o “plaza”, y paredes blancas, más ciegas, en el resto de las fachadas, sin sacrificar por ello la buena iluminación de los espacios. De hecho, otro de los criterios determinantes en la elaboración del proyecto ha sido la búsqueda del mayor aporte de luz natural al edificio (en especial de las consultas), evitando espacios angostos y oscuros, mediante patios en planta primera o en relación con el entorno en planta baja.

El programa se distribuye en dos plantas, con acceso desde un espacio público cubierto, que constituye una servidumbre de paso.Las distintas estancias se ordenan todas según unas premisas muy claras:
En planta baja se divide en una zona más pública y otra de acceso restringido. En la zona pública se distribuye el vestíbulo, la recepción, una sala y una sala de espera. Esta sala de espera sirve para la sala de curas y los dos despachos situados en la fachada norte. Desde el vestíbulo de planta baja arranca la escalera y el ascensor a planta primera. La zona más privada de la planta baja consiste en vestuarios, una sala de reuniones, una zona de descanso para el personal y un almacén de residuos. Se completa el programa de planta baja con un archivo para historiales clínicos, unos baños públicos y un pequeño almacén. El almacén de residuos cuenta con acceso independiente desde el exterior.

En planta primera se sitúan las consultas, que se distribuyen de la siguiente manera: Tres consultas generales con sus correspondientes consultas de enfermería; una consulta de matrona y otra de pediatría con su correspondiente enfermería. Estas consultas disponen de baño propio. Además se distribuyen aseos públicos, aseo personal y salas de espera. En planta cubierta se disponen todas las instalaciones de climatización, en una sala de instalaciones cubierta en algunos puntos.