arrow-circle-down arrow-circle-left arrow-circle-up arrow-down arrow-left arrow-line-right arrow-right arrow-up ballon close facebook filter glass lock menu phone play point q question search target twitter
X
  • Centro de Salud Gévora


  • Centro de Salud Gévora


  • Centro de Salud Gévora


  • Centro de Salud Gévora


Un sofisticado prisma metálico semi-transparente posado sobre un basamento vernáculo, tosco y blanco.

El proyecto surge de conciliar sugerencias de diversa índole, entendidas casí como las condiciones de contorno de una ecuación. LUGAR: Gévora es un pequeño pueblo de colonización encalado en blanco, hoy anexo a Badajoz. El solar se inscribe, exento, en un jardín. Los perímetros, excepto el frontal, son estrechas franjas verdes arboladas, que sugerían abrir grandes huecos y usar el jardín como filtros de amortiguación entre en edificio y las vias rodadas circundantes. PROGRAMA: En un centro de salud, “La forma sigue a la función”. Todo debe estar cercano al acceso, y a la vez, alejado entre sí. Al principio, los diagramas funcionales parecían bocetos de espacios imposibles de M. C. Escher. La planta baja debía ser lo más extensa posible para ubicar gran cantidad de áreas en zonas accesibles. Las consultas y demás salas técnicas requieren una intimidad difícil de conciliar con aperturas directas a la vía pública. CLIENTE: Exigía mínimo mantenimiento y por supuesto costes mínimos: Jardines secos, cubiertas de grava, revestimientos tradicionales de revoco de cal, acero galvanizado o aluminio anodizado…. Con todo esto proyectamos un amplio zócalo blanco de revoco de cal perforado por un patio al que abir las consultas. Encima un prisma de chapa deployé galvanizada montada como revestimiento de paredes sobre un cerramiento convencional de ladrillo enfoscado e impermeabilizado con betún negro y en cubierta como protección superior y sombra. Abajo grandes huecos unificados (uno por fachada) perforados en una masa blanca. Arriba, un prisma abstracto aparentando masa y transparencia, levedad y peso, a un mismo tiempo. El único lujo que nos permitimos fué reortar una esquina del zócalo para crear una pequeña plaza para dotar al centro de un acceso digno. Y al final… una última condición: Que la dirección facultativa sea persona distinta al redactor del proyecto para así lograr mayor imparcialidad, independencia y menor coste de honorarios ¿? Una ingeniería terminará esta historia.

Galería realización

Participaciones en arquia / próxima

II Edición 2008-2009
I Edición 2006-2007