LO NATURAL COMO ESPEJISMO

LOS PARQUES SON, NORMALMENTE, PUNTOS DE EVASIÓN PARA LOS AJETREADOS URBANITAS. SE PRESENTAN EN LAS CIUDADES COMO OASIS DE NATURALEZA, LUGARES DONDE CONSOLIDAR NUESTROS MÁS ESTRECHOS VÍNCULOS CON LOS ELEMENTOS TERRESTRES.

SIN EMBARGO, LOS PARQUES SON SIEMPRE UNA CONSTRUCCIÓN ARTIFICIAL, HUMANA...
HAY IMPLÍCITA EN ELLOS UNA GRAN AMBIGÜEDAD: EL HOMBRE CONSTRUYE UN ARTIFICIO QUE SE HACE PASAR POR NATURAL.


EL PROYECTO PRETENDE INCIDIR EN ESTA REFLEXIÓN. SE INTERVIENE EN EL TIERGARTEN, EL GRAN PARQUE DE BERLÍN, Y EN CONCRETO EN UNO DE SUS DOS LAGOS.

LOS PABELLONES SE INTRODUCEN EN EL LUGAR MÁS RECÓNDITO Y AISLADO DEL PARQUE: EL INTERIOR DELLAGO, PROTEGIDO POR UNA GRAN MASA ARBÓREA.
SE CONSIGUE ASÍ UN ALTO GRADO DE INTEGRACIÓN EN ESTA NATURALEZA ARTIFICIAL, PUES SE DA LA ESPALDA AL RESTO DEL PARQUE MIENTRAS SE VUELCA LA MIRADA SOBRE EL LAGO.

 
POR OTRO LADO, EL PABELLÓN REFLEJA SU ENTORNO; DEVUELVE LA IMAGEN NATURAL Y CAMUFLA SU ARTIFICIALIDAD, ENTRANDO ASÍ EN DIÁLOGO CON ESTE  ESPEJISMO DE LO NATURAL QUE ES EL PARQUE.