Desde inicio de S. XX, el río Ebro ha sido objeto de estudio con intención de aprovechar sus aguas para generar energía eléctrica. Pese a ello, no fue hasta la segunda mitad de S. XX que la Empresa Nacional Hidroeléctrica del Ribagorzana, S.A. (Enher), compañía actualmente integrada en Endesa, proyectó el aprovechamiento del tramo inferior del río Ebro, entre Escatrón y Flix.

El resultado fue la proyección y ejecución de dos grandes centrales hidroeléctricas, el salto de Mequinenza y el salto de Ribarroja, ambos bañados por las aguas del río Ebro.

La central hidroeléctrica de Mequinenza, ubicada en el municipio zaragozano del mismo nombre, presenta el embalse mayor capacidad de Endesa en España, con sus 1.500 hm3 de capacidad total conseguidos gracias a una presa de gravedad de 79 metros de altura sobre cimientos y 451 metros de longitud en coronación. El salto es también, con sus 324 MW de potencia proporcionados por 4 grupos generadores, la mayor central convencional hidroeléctrica de Endesa en nuestro país. Así mismo, es la central de mayor producción hidroeléctrica de Endesa en España.