Londres, 1972: la ciudad está creciendo y, con ella, la necesidad de albergar a las poblaciones trabajadoras. Los valores del bienestar social de la posguerra hacen posible experimentar con nuevas formas de vivienda, lo que marca el comienzo de una era de proyectos utópicos y modernistas. Entre los más atrevidos e innovadores, la finca Robin Hood Gardens de Peter y Alison Smithson.

Los ecos de los expertos y los responsables de la toma de decisiones se escuchan mientras exploramos los pasillos de Robin Hood: sus voces, como ondas de radio disonantes, se turnan para exponer los valores de la propiedad, al mismo tiempo que discuten sobre su reputación, importancia y futuro. Mientras tanto, los retratos íntimos de los residentes expresan la historia emocional, humorística y compleja del proyecto. Mezclando documental y narraciones de ficción, reconstruimos la historia de la finca Robin Hood Gardens gradualmente, desde su transformación inicial de terreno industrial en un vecindario idílico y frondoso, hasta su eventual reconfiguración de la vida callejera en un contexto vertical, antes de pasar a la realidad contemporánea.

Menos de 50 años después, Londres es un lugar muy diferente. La ciudad en constante crecimiento, impulsada por el capital financiero, disuelve los proyectos de vivienda social de la generación anterior, reurbanización por reurbanización. Un horizonte emergente de acero y vidrio define las nuevas normas de vivienda, haciendo que las nociones de bienestar social se parezcan más a la historia que a la política encarnada. Surge la pregunta: ¿a dónde se ha ido Robin Hood? [The Disappearance of Robin Hood]