La tesis profundiza una reflexión de carácter crítico-historiográfico acerca de la proximidad cultural entre la arquitectura moderna italiana y la obra escrita y proyectual de Adolf Loos.
La lección de Adolf Loos es clave de lectura de la labor de algunos críticos y proyectistas italianos, y de una selección de obras realizadas en Italia entre 1925 y 1960.
El número 233 de Casabella (1959), a cargo de Aldo Rossi, supuso un ‘antes’ y un ‘después’ respecto al entendimiento crítico de la obra de Adolf Loos. Rogers y Rossi, en su labor hacia una lectura historiográfica alternativa, empezaban a ‘explotar’ a Loos (además de a otros arquitectos modernos), para rescatar una arquitectura -en el concepto rogersiano “dalla città al cucchiaio”- que apuntaba a la modernidad más allá de los ‘dogmas’ derivados del racionalismo a escala internacional.
Bajo estas premisas, es lícito preguntarse hasta qué punto el desencadenamiento de la ‘fortuna crítica’ de Adolf Loos a finales de los cincuenta había sido casual. En este sentido, el número citado de Casabella no es sino una excusa de carácter argumental, a partir de la cual construir un recorrido analítico-interpretativo de la arquitectura moderna italiana en el que la investigación de Loos representa una ‘referencia’ de carácter europeo y un ‘factor de continuidad’ en relación con la búsqueda de la identidad arquitectónica italiana.
La referencia de Loos deriva, en términos operativos y conceptuales, en una herramienta hermenéutica que permite una lectura alternativa de la arquitectura moderna italiana.
Los discursos invariantes que han dirigido la investigación -entendidos como contenidos metodológicos reconocibles tanto en la labor loosiana, como en las arquitecturas italianas analizadas- han permitido reconstruir parte de aquel tejido conectivo que vincula experiencias, también diferentes entre ellas, en favor de una teoría de la arquitectura provocativa y caleidoscópica.
En síntesis los datos que aporta la tesis permiten afirmar que la obra de Loos:
I. proporcionó el punto de partida para reelaboraciones contextualizadas en términos compositivos, distributivos, espaciales, matéricos. Emerge el papel de la enseñanza del “maestro” en la labor de Giuseppe De Finetti; sin embargo aquella relación directa, cercana y duradera no fue sino el input para la elaboración muy personal de un método que, llevado al contexto italiano, le permitió traer consigo las herramientas para una aportación concreta -aunque ‘silenciosa’ y ‘silenciada’ durante mucho tiempo- a la definición de la arquitectura moderna italiana.
II. pertenecía al limitado abanico de referencias culturales internacionales relacionadas con el nacimiento y desarrollo de la arquitectura moderna italiana. En numerosas de las obras analizadas las temáticas de utilidad y coherencia que contribuyen a definir el concepto de ‘arquitectura como servicio’, encuentran una vinculación teórica en el discurso loosiano de Das Andere; y sin embargolas referencias de carácter formal eran el resultado de un compendio cultural polifacético que apuntaba a Europa central. En la biblioteca de Adalberto Libera aparecen anotaciones que conciernen tanto a Gropius, como a Loos, Dudok y Oud. De una forma parecida, en la obra de Pagano aparecen matices importados de Wright -en la horizontalidad del volumen protegido por la gran cubierta inclinada de la villa Colli-, de Gropius y de la Bauhaus -en el rigor formal y funcional de la planta de la Università Bocconi-, o referencias a Loos -en la simplificación formal y el abandono del ornamento en la definición del volumen masivo del Palazzo per gli Uffici Gualino.
III. ofreció una estructura teórica y un repertorio de soluciones a los que se pueden referenciar arquitecturas que no son réplicas formales absolutas. La obra de Loos proporciona, además de la que el propio Rogers definiría como una “enseñanza metodológica y moral” un repertorio de elementos, guiños y referencias que tras otras interpretaciones (subjetivas, en lugares y tiempos distintos) habían dado lugar a composiciones inéditas. Bajo este punto de vista puede entenderse, de hecho, la primera investigación arquitectónica de Luigi Piccinato, Gaetano Minnucci, Mosé Tufaroli Luciano y Giovanni Michelucci.
Hablamos de posibles ‘parámetros’ de proyecto que podían orientar el enfoque arquitectónico -los mismos que Rossi aplicaría en su primera obra y sobre los que construiría parte de su teoría posterior-; elementos no indistintamente adaptables, que podían valorarse caso por caso y que no dieron como resultado la generalización de éxitos formales.
La tesis sugiere, de hecho, la existencia de unas ‘miradas cruzadas’ que permiten no sólo reafirmar el interés hacia ‘otras’ arquitecturas y ‘otros’ arquitectos en la lectura transversal de la investigación moderna italiana, sino que proporciona una herramienta bajo la cual elaborar una aportación crítica diferente en torno a la obra de Adolf Loos.