Resumen

El panorama contemporáneo pone de manifiesto, por un lado, las pretensiones de unas obras de ámbitos diversos que instigan procesos y resultados propios de lo arquitectónico y, por otro, los tanteos de una arquitectura que toma como referente o como fin un abanico profesional muy amplio. Desde principios del siglo XX, movimientos como el Constructivismo Ruso y la Escuela de la Bauhaus exploraron la confluencia de la práctica artística y la técnica ingenieril como vía de avance para la arquitectura. Tras su huella, arte, ciencia y arquitectura han evidenciado una transferencia mutua de conocimientos, recursos y campos de acción.

La construcción del medio desde la mediación disciplinar (1967-2017)

Esta investigación localiza y desarrolla los precursores recientes de la colaboración disciplinar: unos trabajos que cincuenta años atrás generaron registros habitables alternativos e inauguraron el concepto de “medio” (“environment”) para aludir a un entorno que debía servir a las necesidades vitales del individuo, además de responder a las nuevas preocupaciones sociales y ecológicas. La sensibilidad medioambiental formaba parte de una época por primera vez consciente de las consecuencias del desarrollo industrial sobre el paisaje, lo cual propició la coincidencia de unas teorías artísticas y científicas que ampliaron el sentido del medio con una connotación de sesgo social y ecosistémico, encabezada por los autores Reyner Banham, Kees Boeke, Stewart Brand, György Kepes y Ray y Charles Eames.

Tres casos de estudio inéditos

Como casos de estudio se revelan los programas Experiments in Art and Technology (Nueva York, 1967), Art and Technology Program (LACMA, Los Ángeles, 1967-1971) y Center for Advanced Visual Studies (MIT, Cambridge, 1967), que a final de los años sesenta y en diferentes localizaciones de Estados Unidos impulsaron proyectos en los que artistas, ingenieros y arquitectos colaboraron y construyeron el nuevo medio requerido por la sociedad. Los trabajos que realizaron han permanecido desconocidos en gran medida, aún más para la arquitectura, un campo a menudo ajeno a lo que otras disciplinas pueden reportar a su desarrollo. Sin embargo, las realizaciones de los tres programas fueron clave para ciudades como Nueva York, Los Ángeles y Boston y los arquitectos que se vinculaban a ellas, como Jane Jacobs, Frank Gerhy y Juan Navarro Baldeweg, entre otros. La fundación simultánea de las tres organizaciones conforma el cuerpo principal de la investigación y dibuja el panorama que el último tercio del siglo XX ha dejado en herencia y que sirve ahora para la discusión de nuevas arquitecturas habitables.

El fundamento social y ecológico del nuevo medio

La concepción de los casos desarrollados se separa de la idea de edificio y de ciudad como construcciones universales —como agentes pasivos de convergencia social— para aproximarse a una articulación más compleja del espacio público y privado —como conceptos que deben ser reexaminados bajo una lectura crítica transdisciplinar—. La labor especulativa que entraña la revisión de las obras hace referencia a un sistema conformado por unas técnicas, procesos y colaboraciones alternativas, que son el punto de partida para entender el carácter global con que esos ejemplos confrontan el medio construido. Más allá de que la naturaleza del trabajo pueda ser descrita como un producto en forma de obra de arte, experimento científico o arquitectura, trasciende una concepción mayor referida al hábitat, basada en la colaboración entre diferentes agentes, donde la sociedad, la ecología y la construcción son las vías exploratorias más fructíferas.

Notas finales: una lectura contemporánea

A modo de epílogo y como constatación del argumento de la investigación, el trabajo alude a unos ejemplos recientes de ámbito internacional en los que se reconoce un cambio en el espacio físico con relación a las preocupaciones sociales y ecológicas del siglo XXI. En el itinerario cronológico, el conjunto de las prácticas de mediación disciplinar analizadas presenta una serie de estrategias que constituyen un laboratorio experimental para la arquitectura, que surge en el contexto estadounidense promotor de la concienciación por el medio y que se expande al territorio español y a nivel global en el periodo de tiempo comprendido desde entonces hasta el alcance especulativo del momento actual.

The Building of the Environment; Disciplinary Mediation as an Architectural Laboratory (1967-2017)

Abstract

The contemporary scene brings to light, on one hand, the aims of work from diverse fields triggering processes and results typical of architecture and, on the other hand, the exploration of an architectural practice that holds a very broad professional range as its reference point. Since the beginning of the 20th century, movements such as Russian Constructivism and the Bauhaus School have explored the confluence of artistic practice and engineering technique as a way forward for architecture. In their wake, art, science, and architecture have shown a mutual transfer of knowledge, resources, and areas of action.

The building of the environment from the disciplinary mediation (1967-2017)

This research identifies and presents the recent forefather of the disciplinary collaboration. Fifty years ago, exploratory projects produced alternative habitable conditions and released the concept of “environment” to refer to a surrounding that could serve the vital needs of human beings and answer new social and ecological concerns. The environmental awareness was part of a first-time epoch conscious of the consequences of the industrial development on the landscape. That mindfulness led to the simultaneity of several artistic and scientific theories that broadened the meaning of the environment with an essence of social and ecosystemic turn, headed by the authors Reyner Banham, Kees Boeke, Stewart Brand, György Kepes and Ray and Charles Eames.

The unpublished case studies

As a starting point, attention is focused on the programs Experiments in Art and Technology (New York, 1967), the Art and Technology Program (LACMA, Los Angeles, 1967-1971), and the Center for Advanced Visual Studies (MIT, Cambridge, 1967) which, at the end of the sixties and in different areas of the United States, drove projects where artists, engineers, and architects collaborated and constructed new environments for society. The work they carried out has remained largely unknown, even more in architecture, a field that is often distant to what other disciplines can provide to its progress. However, the achievements of the three programs were key for cities such as New York, Los Angeles, and Boston, and the architects linked to them such as Jane Jacobs, Frank Gerhy, and Juan Navarro Baldeweg, among others. The simultaneous founding of these three multidisciplinary organizations forms the main section of this research and draws the panorama that the last third of the 20th century has left in heritage and which now serves for the discussion of new architecture.

The social and ecological basis of the new environment

The understanding of the case studies distances itself from the idea of buildings and cities as universal constructs —as passive agents of social convergence— to approach a more complex expression of public and private spaces —as concepts that must be reexamined through a critical, transdisciplinary lens. The speculative endeavor of reviewing the work makes reference to a medium formed by alternative techniques, processes, and collaborations that are the starting point in understanding the global character with which these examples face the environment. Beyond the fact that the nature of this multidisciplinary work may be described as something in the way of art, a scientific experiment, or architecture, what transcends is a wider understanding of the surroundings, based on the collaboration between different agents, where society, ecology, and construction are the most fruitful exploratory paths.

Final notes: a contemporary review

For the epilogue and as proof of the research argument, the work includes some recent international examples in which social and ecological concern modifies 21st-century architecture. Across the chronological roadmap, the analysis of this set of practices in disciplinary mediation presents a series of strategies that constitute an experimental laboratory for architecture, emerging in the North American context following environmental awareness and expanding into Spanish and international territory over the period from then until the speculative reach of our current time.

A construção do “environment”. Rumo à mediação disciplinar como laboratório de arquitetura (1967-2017)

Resumo

O panorama contemporâneo manifesta-se, por um lado, em pretensões de obras de diversos âmbitos que instigam processos e resultados próprios da arquitetura e, por outro, porpontuações de uma prática que se assume como objectoou referência de uma ampla panóplia profissional. No início do século XX, movimentos como o Construtivismo Russo e a Escola Bauhaus apelaram à confluência da prática artística com a técnica da engenharia como via de progresso para a arquitetura. Desde então, arte, ciência e arquitetura evidenciam uma transferência mútua de conhecimentos, recursos e campos de ação.

A construção do “environment” a partir da mediação disciplinar (1967-2017)

Esta pesquisa contextualiza e estuda os precursores recentes da colaboração disciplinar: projetos que há cinquenta anos atrás propuseramdispositivos habitacionais ​​alternativos e queinstauraram o conceito de "meio" ("environment")como alusão auma circunstânciaque deveria satisfazeras necessidades vitais do indivíduo, para além de responder a novas preocupações sociais e ecológicas. Uma sensibilidade ambiental que formavaparte integrante de uma época pela primeira vez consciente das consequências do desenvolvimento industrial na paisagem, a qual proporcionoua coincidência de teorias artísticas e científicas que ampliaram o significado de meio ambiente com uma conotação de transformação social e ecossistémica, encabeçada por autorestais como Reyner Banham, Kees Boeke, Stewart Brand, GyörgyKepesou Ray e Charles Eames.

Três estudos de caso não publicados

Como casos de estudo, são apresentados os programas “Experiments in ArtandTechnology” (New York, 1967), “ArtandTechnologyProgram” (LACMA, Los Angeles, 1967-1971) e“Center for Advanced Visual Studies” (MIT, Cambridge, 1967) que no final dos anos 60, e em diferentes locais dos Estados Unidos, promoveram projetos onde artistas, engenheiros e arquitetos colaboraram para construirum novo “meio” exigido pela sociedade. Os projetos realizados permaneceram em grande parte desconhecidos, sobretudo para aarquitetura, uma área frequentemente alheiapara o desenvolvimento de outras disciplinas. No entanto, as realizações dos três programas foram não apenas fundamentais para cidades tais como Nova York, Los Angeles ou Boston, mas também para os arquitetos a elas vinculados, tais como Jane Jacobs, Frank Gerhy e Juan Navarro Baldeweg, entre outros. O entrosamento das três organizações constitui o corpo principal da pesquisa e desenha o panorama que o último terço do século XX deixou no património e que serve agora de discussão para novas arquiteturas habitáveis.

A base social e ecológica do novo “environment”

A concepção dos casos desenvolvidos é separada da ideia do edifício e da cidade como construções universais - como agentes passivos da convergência social - para abordar uma articulação mais complexa do espaço público e privado - como conceitos que devem ser reexaminados sob uma leitura crítica transdisciplinar. O trabalho especulativo envolvido na revisão dos trabalhos faz referência a um sistema composto de técnicas alternativas, processos e colaborações, que são o ponto de partida para percebero carácter global com o qual esses exemplos confrontam o ambiente construído. Além do facto de que a natureza do trabalho possa ser descrita como um produto em forma de obra de arte, experimentação científica ou arquitetura, transcende umaconcepçãomaior relacionadacom o habitat, baseado na colaboração entre diferentes agentes, onde sociedade, ecologia e construção constituem as vias exploratórias mais frutíferas.

Notas finais: uma revisão contemporânea

Como epílogo e constatação do argumento de pesquisa, o trabalho refere alguns exemplos recentes de âmbito internacionalondese reconhece uma mudança no espaço físico relacionada comas novas preocupações sociais e ecológicas do século XXI. De forma cronológica, o conjunto de práticas de mediação disciplinar analisadas apresenta uma série de estratégias que constituem um laboratório experimental para a arquitetura, que surgemdo contexto norte-americano promotor da consciencialização pelo “meio” e que se expandemao território espanhol eglobal numdeterminado período de tempo compreendido desde então até o alcance especulativo do momento atual.