Recibimos el encargo de realizar el proyecto de interiorismo para una tienda de ropa infantil en un local de apenas 50 m2.
Dados los tamaños tan diferentes de la ropa de niño, que, en este caso, va desde 0 hasta los 12 años, se presenta como un reto exponer un producto de una gama tan amplia, en un espacio tan reducido.
Utilizamos como germen del proyecto la idea de convertir Neroli en una casa en el árbol en un bosque de escamas, una tienda con muebles de caramelo.
Diseñamos un mobiliario flexible y modular capaz de acoger ropa de diferentes tamaños y presentar varias disposiciones utilizando una misma estructura mediante varillas y tableros intercambiables. Esto permite que los colgadores puedan cambiar a lo largo del tiempo según la cantidad y el tipo de ropa que se exponga, dependiendo de la edad y la temporada.
La colocación de los expositores de ropa en el perímetro nos permiten recorrer la tienda alrededor de un mueble central con vegetación, que sirve de zapatero y probador de calzado.
Siguiendo con la idea del proyecto, para crear una atmósfera cálida e intima, se revisten las paredes con más de 3000 escamas de MDF chapeado de haya, fresno,
nogal y roble cortadas por láser, mientras que el suelo se cubre con “baldosas” de pino radiata de 60×60 cm.
Todo el mobiliario está fabricado con tableros de pino radiata mecanizados mediante CNC y listones de abeto torneados.