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UNA TORRE Y UNA PLAZA

Al visitar por primera vez la parcela donde deberá emplazarse la futura comisaría de policía del distrito de Fuencarral – El Pardo encontramos a una mujer paseando a su perro, disfrutaba de un vacío urbano cercano a su casa, al cual había podido acceder a través de un hueco en la verja que acota la parcela. Entonces entendimos la necesidad de no negar la amplitud que dota a los barrios una cierta desocupación de la superficie edificable. Con la intención de conseguir dicho objetivo, se plantea la densificación puntual del programa de la comisaría de policía en una zona de la parcela, una torre, constituida por el apilamiento de ciertos usos.

La densificación de programas diversos en altura no sólo supone un ahorro de espacio urbano pudiendo ser utilizada la superficie no ocupada como espacio libre urbano sino que además permite el aprovechamiento de recursos que ofrece la altura, desde el aprovechamiento interior de las vistas obtenidas al elevarse, a la presencia visual simbólica del edificio en el entorno (el edificio como símbolo, como hito).

Al concentrar el programa en una torre y con ello realizar una ocupación mínima de la parcela, ésta queda liberada de las necesidades programáticas pudiendo ser cedida al uso público convirtiéndose lo que era un simple solar en una plaza urbana.

 

PRESENCIA URBANA: UNA COMISARÍA VISIBLE

La presencia de una comisaría es un valor en un barrio. La presencia de la policía es percibido por los vecinos como un símbolo de protección, de seguridad. Sin embargo, la presencia urbana de las comisarías es prácticamente nula. Se suele reducir al cartel que las identifica como tal y los vecinos del distrito no suelen tenerla localizada en el entramado urbano de su barrio.

Al localizar parte del programa en una torre el edificio de la comisaría toma presencia urbana. La gente puede ver la comisaría desde su casa, desde el parque, desde la terraza de una cafetería. El edificio de la comisaría de policía del distrito de Fuencarral – El Pardo entraría a formar parte del paisaje urbano.

EL SÍMBOLO Y LA VENTANA. DOS ESCALAS DE ACTUACIÓN: URBANA Y HUMANA.

La perforación en los muros de la comisaría debe de tener en cuenta la condición de hito de una torre puesto que va a condicionar la presencia visual de ésta.
Planteamos para este edificio un sistema de apertura de huecos que permita identificar el edificio desde la lejanía. Este mismo sistema de huecos es percibido desde el interior y desde una distancia corta como meras ventanas o perforaciones en la fachada, y solo a medida que nos alejamos se hace patente la intención simbólica del patrón utilizado

Participaciones en arquia / próxima

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